• 18 junio, 2025 06:25

El alcalde se sube tarde al ring.

Dialéctica Política Potosina.

El alcalde se sube tarde al ring.

Por: El Ángel guardián / 30 de mayo de 2025

  • En la política potosina, el pleito ya no es de fondo, es de forma, de grilla pura y dura. Hoy, más que nunca, el ring está instalado y los golpes se reparten sin guantes. El problema no es que haya pleito —eso hasta saludable es en una democracia—, el problema es cuándo y cómo se entra a la pelea. Y el alcalde de la capital, Enrique Galindo, decidió subirse al ring tarde, sin esquina, sin respaldo y con los guantes mal puestos.
  • Durante meses, el alcalde aguantó los embates del gobernador Ricardo Gallardo como si no pasara nada. Lo dejó golpear, lo dejó tomar la iniciativa mediática, social y política, sin responder. Pero de repente, ya en plena contienda electoral, Galindo quiso meter las manos. El problema es que el que se sube tarde, ya entra con el rostro inflamado y sin aire en los pulmones. El gobernador, hábil como es en el juego de percepciones y en el uso de su estructura político-mediática, ya le llevaba varios rounds de ventaja.
  • Y, por si fuera poco, ahora la pelea no es solo con Gallardo, sino también con su esposa, la senadora y candidata Ruth González. Un juego de dos contra uno en el que Galindo apenas empieza a tirar golpes, pero ya los recibe por todos lados.

Sin esquina ni respaldo.

  • En la esquina del gobernador, saltan a defenderlo con entusiasmo: el dirigente estatal del Verde, los operadores políticos, los influencers del oficialismo, y hasta parte del Congreso. Todos listos para hacerle segunda, para amplificar el mensaje, para validar sus dichos.  ¿Y quién está en la esquina del alcalde? Nadie. O peor aún, nadie con peso.
  • El PAN, partido que supuestamente lo arropa en esta alianza opositora, no ha hecho ni el más mínimo intento de sacar la cara por él. Ni el secretario general, ni el dirigente municipal, y mucho menos alguien con autoridad moral o política. En lugar de mandar un golpe político, mandan al que pasa por ahí, al de guardia, al que está a la mano. Porque lo que queda del PAN en San Luis Potosí no tiene ya ni fuerzas ni ganas de dar la batalla.
  • Y ahí está el punto central de esta tragicomedia: la dirigente estatal del PAN, la senadora Verónica Rodríguez, tampoco se ha metido de lleno a respaldar al alcalde. Y no es que no pueda, es que no quiere. Porque también ella tiene compromisos con el gobernador, igual que los tiene con Galindo. Es decir, sirve a dos amos, y como bien dice el viejo y sabio refrán: “El que a dos amos sirve, con uno queda mal” … y en este caso, está quedando mal con todos.

El fuego amigo y la falta de palabra.

  • A todo esto, se suma que Galindo ha ido quedando mal con muchos dentro y fuera de su administración. Hay quienes lo apoyaron, quienes creyeron en un proyecto distinto, quienes pensaron que haría las cosas diferente. Pero la falta de palabra y la tibieza política han ido desgranando su respaldo. Hoy, no hay quién salga a defenderlo con convicción. Nadie se quema por él, porque él no se ha quemado por nadie.
  • Mientras tanto, el gobernador sigue con su estrategia de desgaste: atosiga en lo mediático, en lo presupuestal, en lo territorial. Y ahora, con su esposa como candidata a la alcaldía, ha subido la apuesta. El pleito ya no es solo político: es familiar, personal, territorial, emocional. Y Galindo, en lugar de haber armado su estrategia desde antes, apenas empieza a lanzar manotazos.
  • El problema es que ya no alcanza con reaccionar. A estas alturas, se necesita algo más que videos editados o mensajes en redes. Se necesita estructura, respaldo y calle. Y parece que al alcalde le faltan las tres.

La pregunta final.

  • La pregunta no es si Enrique Galindo va a resistir esta embestida —que lo hará, como lo ha hecho antes—, sino si va a aprender que en política no se puede pelear solo, ni se puede confiar en quienes tienen compromisos divididos.
  • Porque si algo ha demostrado esta coyuntura, es que en la política potosina ya no caben los equilibrios tibios ni los amarres por debajo del agua. Hoy, o estás de un lado o del otro. Porque al que intenta nadar entre dos aguas, lo arrastra la corriente… o lo hunde la marea.
  • Y así, mientras el gobernador se fortalece con una estructura bien aceitada, Galindo empieza a darse cuenta que la pelea no se gana con discursos tardíos ni con alianzas de papel, y mucho menos confiando en un partido que ni siquiera puede salir a dar la cara por sus propios candidatos.
  • El round está en marcha. Pero todo indica que el alcalde se subió tarde, sin esquina, y con el rostro ya marcado.

Sin paridad de género el gabinete del Municipio de San Luis Potosí.

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