• 22 diciembre, 2025 13:25

A QUIEN LE QUEDE EL SACO.

Por: Gabriel Ramos Guerrero / 17 de diciembre de 2025

EL día de hoy, quiero pedirle una disculpa por anticipado querido, finísimo y carísimo lector…

SI usted, me lo permite, este humilde servidor de las causas nobles y no tan nobles, se va a salir un poquito del guion…

Y es que déjeme decirle que, en mi paso por esta vida, me he encontrado a diversas personas y escuchado a unas cuantas más que como les encanta mentir…

¿PORQUE le digo esto?, bueno, le voy a contar que me encontrado a mucha, mucha gente y he visto a bastante más, que como les encanta crear historias a partir de cualquier cosa y distorsionar la realidad a base de mentiras…

¿PERO sabe usted amable lector, cual es el problema?…

LA dichosa mitomanía y/o mentira patológica, y ese, mi estimado lector, sí que es un problema muy grande, que laencontramos, sobre todo en políticos y toda clase de funcionarios públicos…

SIN embargo, también lo encontramos en hombres y mujeres “comunes”, ya no le digo de que tipo de hombres y mujeres…

PERO ¿QUE es eso? Dicen por ahí, que es un trastorno psicológico que causa una necesidad compulsiva de mentir de forma sistemática y exagerada, a menudo sin un beneficio claro…

SE llega hasta el punto de que la persona puede llegar a creer sus propias fantasías, distorsionando la realidad para buscar atención, validación o como una estrategia de escape…

PARA ello, estimado jefe-lector, se requiere de terapia para tratar sus causas subyacentes como la baja autoestima o traumas…

PERO déjeme decirle que es también una compulsión, o sea una tendencia incontrolable y recurrente a inventar historias, detalles falsos o exagerados sobre sí mismo o eventos ficticios…

EL mitómano puede perder la noción de la realidad y llegar a creer sus propias narraciones inventadas…

Y COMO le digo, en nuestro país, estado y, municipios tenemos funcionarios y servidores públicos que cómo padecen de esto…

MIENTEN de manera sistemática, distorsionan la realidad a placer y crea sus propias historias, que, aunque ficticias, ellos mismos llegan a creérselas…

PERO aún peor, las hacen públicas pensando que el resto de la gente son como ellos, que, aunque le repito, si hay muchos mitómanos y mitómanas…

LE reitero, me encontrado a muchos y muchas, algunos identifican al o la mitómana como celos@s, envidios@s, engreíd@s, ególatras, etc, etc, y un largo etc, pero muy, muy largo…

LAS causas más comunes de los y las mitómanas son baja autoestima, trastornos subyacentes o como mecanismos de defensa…

VEALO usted mismo mi estimado fino lector…

A DIARIO encontramos este tipo de gente distorsionando la realdad, mienten porque su naturaleza rara es así…

PERO PEOR AÚN, la mentira la convierten en verdad, en su verdad, aunque obviamente todavía le ponen de su cosecha…

Y ya me voy querido, estimado y finísimo lector de este mitómano, advirtiendo que no me crea tanto…

ES cuanto…