• 13 diciembre, 2025 23:47

Leviatán – editorial: Comparecencias de funcionarios estatales: Circo de varias pistas o…

Comparecencias de funcionarios estatales: Circo de varias pistas o ejercicio real de rendición de cuentas.

Algunas sugerencias de que podrían cuestionar los diputados.

Ignacio R. Acosta D.L. / 20 de octubre de 2025

Una señal de la consolidación efectiva de la democracia es, sin duda, la comparecencia de funcionarios públicos ante los integrantes del congreso, máxima y única representación popular, el que, de acuerdo al modelo político legislativo mexicano, es la forma más directa en que se representa al ciudadano común y corriente, como un poder parte del equilibrio en las relaciones entre el ejecutivo y el judicial de nuestro país.

Particularmente, las comparecencias deberían considerarse por parte de las y los legisladores como una oportunidad para evaluar y recomendar mejoras, a través de la operación política o del diseño, debate y aprobación de nuevas leyes o sus respectivas reformas específicas, hacia el ejercicio efectivo de los derechos  y realidades de la vida comunitaria y del ejercicio del poder, las funciones, responsabilidades y la efectividad de las políticas públicas y la aplicación de los recursos públicos que el poder ejecutivo realice de acuerdo a lo que establece el plan estatal de desarrollo.

Para abonar a esta consolidación democrática y de rendición de cuentas, este ejercicio debería ser frecuente varias veces al año, existiendo para ello, aunque no se aproveche, el marco jurídico para realizarlo y no solamente una sola vez, con motivo del informe anual de labores que presenta el titular del poder ejecutivo ante el congreso y ante la sociedad.

Particularmente, la constitución política de San Luis Potosí, establece como responsabilidad tanto del ejecutivo como del legislativo, presentar y recibir dicho informe de gobierno, pero también, el congreso está facultado por la fracción XXV de su artículo 57, para: “Solicitar al Ejecutivo la comparecencia de cualquier funcionario de la administración pública estatal para que informe u oriente cuando se discute una ley o se estudie un asunto que se relacione con su función, así como para que informe sobre algún asunto de su competencia”.

Por otro lado, la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado, establece además de la obligación de recibir el informe del titular del ejecutivo, “sobre la situación y perspectivas generales de la administración pública”, el cual será analizado por el congreso en reuniones temáticas subsecuentes, a las que serán citados los funcionarios competentes del ramo, a fin de formular observaciones y cuestionamientos sobre el mismo.

Y es en este punto en el que, por conveniencia, ignorancia o “estrategia”, hasta la fecha y particularmente en las comparecencias que inician hoy con motivo del cuarto informe de gobierno de Ricardo Gallardo, no se cumple a pie juntillas, aunque la interpretación puede ser amplia, y así lo hacen las y los legisladores, ya que se citó a comparecer sólo a 10 de los 20 secretarios de estado o titulares de primer nivel, sin contar a 4 subsecretarios y a infinidad de funcionarios titulares de organismos públicos descentralizados o de la administración pública paraestatal, quienes en ningún momento, han pasado en ninguna administración estatal, por la aduana del congreso para por lo menos conocer su cara y sobre todo, el desempeño y resultados que en sus manos recaen.

Para este año, solamente se citaron a comparecer para este lunes a los titulares de la Secretaría General de Gobierno; a la de la Secretaría de Desarrollo Social y Regional; a la de la Secretaría de las Mujeres e Igualdad Sustantiva, y al titular de la Secretaría de Desarrollo Económico, esperemos cuanta comitiva lleva cada uno. 

Para el martes 21: la Secretaría de Finanzas; la de la SEDUVOP y el de Educación y para el miércoles: la mercadóloga Secretaría de Salud; el de Seguridad y Protección Ciudadana y a la de la SCT.

Resalta entonces, que se dejó fuera de las comparecencias, a responsables de áreas tan importantes como la contraloría del estado, la secretaría técnica, la ejecutiva de seguridad pública, la dirección general del DIF, la del deporte, el de la juventud, el secretario de cultura y a la de turismo, al de la comisión estatal del agua, al titular de la SEDARH, a la de ecología, al de la FENAPO, al del SEER, al de la junta estatal de caminos, al consejero jurídico, al titular de la oficialía mayor, al de trabajo, al de pensiones, al SIFIDE y a muchos otros más.

Del formato, hasta pena da describirlo: cada uno de secretarios “afortunados en comparecer”, tendrá para ello sólo 2 horas, tiempo insuficiente para analizar, desglosar y cuestionar temas de estado, sin contar que el ejercicio seguramente iniciará impuntual, que el titular dispondrá de 15 minutos para una exposición inicial, que regularmente “para agotar el tiempo” muchos se llevan mucho tiempo mas que eso, con las consiguientes cuestionamientos de diputados de hasta 5 minutos con otros 5 para responder, más la consabida replica si es necesaria, lo que en total, si bien nos va, para los fines de la rendición de cuentas, que sólo será posible la participación de máximo 5 o 6 diputados por cada comparecencia… ¿burla, circo, o eficiencia legislativa?

Lo anterior, sin contar que probablemente, funcionarios y diputados previamente ya se habrán puesto de acuerdo en las preguntas y hasta en las debidas respuestas, para que todo quede “planchadito”, sin riesgo y pretendiendo hacer creer a la ciudadanía que todo se llevó a cabo de manera transparente, profesional y, sobre todo, de contenido sustantivo que enriquecerá el trabajo legislativo.  ¡Que poca … Vergüenza!

Por eso y sin el ánimo de ser exhaustivos, las siguientes son algunas sugerencias de cuestionamientos a los comparecientes: Al secretario general: ¿Cuál es el grado de gobernabilidad democrática del estado?; ¿Por qué la CEDH no cumple en respetar, difundir y defender los DDHH en el estado?; ¿Por qué el consejero jurídico del estado pasea a su perro en horas de oficina?; ¿Cuánto cuesta quitar a los manifestantes de la plaza de armas?; ¿Por qué siguen sin aplicarse las medidas ordenadas en materia de personas con discapacidad en el plan estatal de desarrollo?

A la titular de SEDESORE, ¿Por qué la pobreza no baja sustantivamente?; ¿Cuál es el modelo de desarrollo del estado?; ¿Qué cumplimiento hay de los indicadores de la agenda 20-30?

A la encargada de la Secretaría de las Mujeres, ¿Por qué continúa como encargada de despacho, más interesada en conservar su trabajo que en hacer sustantivamente sus funciones, cómo reducir la violencia contra la mujer?; ¿Por qué sigue fallando la alerta de género?; al titular de la Secretaría de Desarrollo Económico, ¿Cuál es el gasto de la oficina del gobierno del estado en Japón y como pueden los empresarios realmente beneficiarse de ella, más allá del discurso; ¿Cuánta gente de la secretaría ha viajado internacionalmente con su titular y cual ha sido su papel en el viaje y sobre todo, ¿Cuántas empresas y que inversión nacional o extranjera, ha negociado esa secretaría para los próximos años?. 

Escucharemos los cuestionamientos de las y los legisladores, para ver el tamaño de su pena, compromiso, precio o ignorancia.